Se trata de la cuaresma
un tiempo muy importante
en el que el pecado se diezma
y nos invita a ser orante.
Se inicia como sabemos
el miércoles de ceniza,
así nos comprometemos
y también nos enfatiza.
Pues nos hace recordar
que todos del polvo salimos,
y la vida al terminar
en polvo nos convertimos.
Este es el primer ayuno
y abstinencia de verdad,
alimento de carnes ninguno
cambiemos, hay variedad.
Todo esto es obligatorio
desde catorce años de edad,
excluyendo, es notorio
al que sufre enfermedad.
También los viernes guardemos
la abstinencia de la carne,
no para que adelgacemos
sino con respeto se guarde.
Hay gente muy marginada
que carece de comida,
y nunca le damos nada
sufren mucho en esta vida.
Hoy debemos de ponernos
la mano en el corazón,
compartir lo que tenemos,
¡vivir la conversión!
Profra. Rosa María Gómez G.
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