abril 01, 2012

ANGELITOS EN LA TIERRA

‘‘La hora del planeta’’ 

Por Mariela Valencia 

Hola, amigos, los saludo con alegría como cada ocho días, esperando que se encuentren de maravilla. 

Esta semana quiero hablarles de un tema que quizá muchos de ustedes ya conocen y estoy segura que han contribuido o contribuirán con esta buena causa. 

Desde hace varios años, el Fondo Mundial para la Naturaleza, WWF por sus siglas en inglés junto con millones de seres humanos, ha llevado a cabo diversas acciones para mejorar las condiciones de nuestro planeta. 

Una de esas numerosas acciones conocida como ‘‘La hora del planeta’’ fue realizada por primera vez en el 2008 con la participación de y unión de distintos países del mundo. 

Dicho evento consiste en apagar y desconectar durante exactamente una hora todos los aparatos eléctricos que puedan existir en casas, empresas, comercios, escuelas, hospitales o cualquier sitio de la Tierra, incluyendo también todo tipo de lámparas y luces. 

Todo esto tiene el objetivo de permitirle a nuestra Tierra, descansar y respirar tranquilamente por lo menos sesenta minutos. 

Todos sabemos que el planeta hace segundo a segundo un gran esfuerzo para brindar a todos los seres humanos las condiciones necesarias para la vida, desde los recursos naturales como lo son el agua y el oxígeno, hasta servicios sofisticados como la energía eléctrica. 

Por eso, se ha considerado que con ‘‘La hora del planeta’’ los habitantes de este mundo, podemos devolver una pequeñísima parte de todo lo que la naturaleza nos da para poder vivir. 

Es por estas razones que los invito a que este sábado 31 de marzo de 2012 de 8.30 a 9.30 de la noche, apaguen absolutamente y desconecten todos los objetos eléctricos que tengan en ese momento a su alcance. Asimismo, les pido que corran la voz y compartan esto con sus familiares y amigos, para que ellos se unan a esta importante causa y se pueda cumplir con el objetivo principal. 

Amigos, es momento de tomar conciencia y hacer todo lo que esté en nuestras manos para ayudar a la Tierra, pero no sólo una hora al año, sino siempre, a cada instante, para que así el planeta azul, continúe compartiendo con nosotros el privilegio de vivir por muchísimos años más. 

Me despido de ustedes, deseando para todos lo mejor de esta vida, la cual debemos disfrutar, pero ante todo valorar y cuidar como sólo ella lo merece. 

Éxito y bendiciones.

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